Todavía no lo saben, porque a muy pocas personas les comenté de esto, ni siquiera a muchos de mis mejores amigos y amigas porque hoy finalmente me siento con la tranquilidad de poder expresarme y compartirlo:
Como muchos me conocerán, siempre he sido una persona con sobre peso. Hoy en día no me da vergüenza reconocerlo, pero antes sí; ¿y qué ha cambiado? El hecho de que ahora estoy haciendo algo para remediarlo, lo estoy haciendo desde hace un mes, pero me siento bien desde el primer día que tomé esta decisión.
Antes me sentía la ropa cómo me quedaba de apretada, me metía en las tiendas a probarme pantalones y buscaba tallas grandes. Ahora no muchas cosas han cambiado, sólo el hecho de que me siento más feliz aunque desde aquella vez no piso una tienda, sólo por el hecho de que todavía no tengo según yo, una talla más acorde con mi estatura, como para querer invertir en ropa todavía. Sin embargo ya con el hecho de haber cambiado la mentalidad, siento que "me quité un peso de encima"... Literalmente han sido 5 kg que me quité de encima en un mes.
Estar en una espiral de dolor, como yo le llamo, me hacía más sencillo el hecho de acudir a la comida. Simplemente, era más fácil sentarme a tragar cualquier tipo de basura (como papas fritas empacadas) sin una pizca de consciencia sobre qué le estoy dando a mi organismo. Es más sencillo echarse a comer cosas "ricas", que complacen al paladar unos minutos mientras son masticadas... pero el efecto a largo plazo que producen en nuestro cuerpo es lo más grave.
Espiral de dolor
Les voy a comentar sobre mi Espiral de dolor:
Problemas, problemas, problemas:
He estado pasando por tantas situaciones complejas que a veces sentía estar hundiéndome dentro de mi propia cabeza. La enfermedad de mi papá, la distancia, la falta de dinero, los desacuerdos cotidianos, mi gatito que tuve que dar en adopción... Los problemas que salen de mis manos como por ejemplo: los problemas entre otras personas cercanas que siempre me han afectado anímicamente y que por desgracia no puedo resolver. El mismo hecho de tener que resignarme tras entender que no puedo "arreglar el mundo". Darme cuenta de muchas realidades de la vida. Que todo cuesta caro, y no me refiero a la parte monetaria; me refiero a tantos sacrificios que uno debe hacer... y esa es sólo la cuarta parte de todo lo que representa mi Espiral de dolor.
Es como una espiral, que se va hundiendo como un taladro hacia abajo, y tala, y tala, y tala; y atraviesa, y atraviesa, y atraviesa, ocasionando dolor. Lo peor del caso es que yo misma suelo (y cómo deseo poder usar ese verbo en pasado) lanzarme en ese agujero y caigo, y caigo. Caigo en un abismo de decaimiento donde todo es oscuro y nada está bien.
Disculpen por darles malas noticias pero, no se preocupen, que no todo es malo, sobre todo después que tomé esta decisión.
Creo que me sentí tan mal, que toqué fondo, es decir, no podía caer más. Ya no quería sentirme así. Parecía imposible salir de ese estado cuando tanto a mi alrededor se disparataba. Fue cuando se me ocurrió hacer algo para mejorarlo; algo que sí estaba en mis manos, algo que yo podía controlar. Algo que tal vez no iba a arreglar todos mis problemas, ni los del mundo entero, pero sí me iba a ayudar a salir adelante:
Decidí bajar de peso.
La verdad no fue una idea planificada, sino que surgió por un video muy conmovedor que pude ver. Me apareció de la nada en YouTube mientras veía ese tipo de videos tiernos. De hecho, recuerdo que intentaba sentirme mejor unos videos que se titulan algo así como: "Fe en la humanidad restaurada" donde personas salvan a otras, rescatan animales y así.
El video:
Cuando lo vi, me sentí tan identificada con la chica (@coachkailin), porque, ambas pasamos por un momento fuerte y ella me enseñó con su video, que se puede salir adelante, con esfuerzo, sudor y lágrimas, pero al final, muestra que logró superar todos los obstáculos y finalmente cumplió su meta.
Quise ser esa persona, que sé que soy en mi interior. Una persona fuerte, capaz de seguir adelante contra todo altibajo, contra toda tentación, por el logro de mis objetivos. A veces se me olvida que yo también soy determinada en mis decisiones, por ese mismo estado inducido por mi misma de quedarme en cama hasta tarde, comer basura, ver netflix todo el día... que me hacía más daño que las mismas circunstancias que me estaban/están pasando en ese/este momento.
Hoy en día tengo los mismos dramas a cuestas: Extraño a mis padres, La enfermedad de mi papi, la situación económica, extraño a mi gato... pero yo me siento más sana. Siendo una persona tan sentimental, puedo afirmar que es mucho más llevadero cuando me cuido a mí misma. Siento que no sólo estoy más liviana de peso, sino que también de espíritu, porque cuando me siento más activa: salgo, camino una hora para mover mi cuerpo o bailo en casa para sudar y ayudar a mi metabolento (metabolismo lento) a que trabaje correctamente y me nutro de cosas que sí me limpian la sangre... el ánimo también me mejora, mi actitud ante la vida es más positiva y mi creatividad fluje en la dirección correcta.
He cambiado un montón, pero no soy otra persona, tampoco quiero ser otra, sólo quiero quitarme esta capa para que finalmente salga a la luz quien yo soy: una persona que estuvo dormida, ensimismada y apagada, pero ahora es sólo un botón de flor que se está abriendo poco a poco. Esta capa, la identifico como el sobre peso que tanto me ha afectado toda mi vida, también como las inseguridades que vienen de la mano con él, los tabúes que me han hecho despreciar muchos momentos de manera injusta. En fin, no sólo es el sobre peso, es muchas cosas negativas en mi vida de las cuales quiero desprenderme para siempre.
Me inspiró tanto este video, que deseo yo también poder ser una inspiración para otros mediante estas publicaciones, para que salgan de ese estado y luchen por su meta. Visualicen su meta y muévanse! Así fue como entendí que "La recompensa se encuentra en el ESFUERZO, no en el resultado" el resultado es una consecuencia de tu esfuerzo. Y cuando veo que día a día se me presentan oportunidades para decirle: NO a un helado, NO a un segundo plato de postre, NO a comer sin hambre o por puro antojo, es cuando ese "NO" se transforma en mi(s) recompensa(s) del día.
Voy a continuar en el siguiente post y comentar más acerca de este que yo le llamo mi propio viaje, porque realmente me siento como en otro país: el país de aprender a comer, donde puedo romper los grilletes de mi relación anterior con la comida, una relación donde no era libre, donde dependía de un chocolate porque si no lo comía, me ganaba la ansiedad. ¡Ya se acabó comida, ahora yo mando aquí!
Sé mi copiloto en este viaje a una vida saludable! Continúa leyendo mi pequeño blog.
AIANA
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